“Es canto de libertad de un hijo de la sabana, que siente dentro de su pecho que su tierra lo reclama” canta el llanero en ‘Mi Grito’
Dentro de una industria musical que cambia y se mueve a pasos agigantados, las fusiones y la innovación sonora han desdibujado los límites existentes entre prácticamente todos los géneros musicales.
Durante los últimos años, gran fuente de inspiración dentro de la afanada búsqueda de innovación y crear “nuevos géneros” han sido los ritmos y géneros folclóricos de distintas partes del mundo, que sin duda alguna han servido para refrescar una escena musical dominada por los sonidos computarizados, pero, en esa afanosa búsqueda de crear e innovar con el sonido, ¿nos estamos olvidando de preservar y transmitir ese verdadero sonido que nos identifica (o identificó a nuestros antepasados)? ¿Nos estamos preocupando realmente de nuestro folclor?
Por eso vale la pena, en algunas ocasiones, poner el freno, dejar de buscar en las fusiones ese nuevo sonido y entender que dentro de la tradición puede estar eso que se está buscando.
Aunque para el Cholo Valderrama el folclor pierde su esencia al ser grabado e industrializado, sus cantos, trovas y gritos de vaquería son lo más cercano que muchas personas pueden estar para entender y tener una perspectiva de la majestuosidad de ese territorio del llano colombovenezolano, y de comprender más a fondo la verdadera idiosincrasia de este territorio.
El nuevo disco de estudio del Cholo, llamado Tradición, no es solo una mirada a esas tradiciones vividas del artista dentro de su territorio, también es un llamado a olvidar esos estigmas para con las personas llaneras y entender mejor, como lo dice el título, sus tradiciones.
“Tradición, eso es lo que trato de hacer con mi música, para eso fui encargado por mi tierra, respetar las tradiciones y cantar joropo”, así definió en exclusiva para ROLLING STONE en Español este nuevo disco el Cholo Valderrama.
A ritmo de capachos (instrumento semejante a las maracas usado en el llano) la campesina y rasgada voz del artista de 73 años toma todo el protagonismo de esta primera canción, casi a capela, llamada ‘Allá en el Araguaney’. ‘Gabán Cholero’ le abre el paso a ‘Me gusta la gente, primo’, una canción que presenta la humanidad del llanero: “Me gusta la gente, primo, noble, sincera y honesta, con una humildad manifiesta de trabajo y sacrificio. Me gusta la gente, primo, con el ímpetu de un potro, que nunca se creen más que otro ni tampoco más poquito”.
Al iniciar ‘Mi grito’, los sentidos y memorias se trasladan a lo que fue la afamada canción ‘Llanero si soy llanero’; está nueva producción podría ser la continuación de lo que fue ese gran éxito lanzado en 2001, en donde exclama: “Es canto de libertad de un hijo de la sabana, que siente dentro de su pecho que su tierra lo reclama”.
‘Mi potranca flor de caña’, ‘Me gusta el caballo cueno’ y ‘Pasaje triste’ anteceden a la última canción y momento cúspide del disco, un contrapunteo entre el Cholo y la que para él es la mejor repentista (persona que tiene la habilidad de improvisar versos, generalmente en décimas, al ritmo de la música) de la música llanera, Vanesa Esteban. “Los llaneros del campo tenemos fama de machistas, ahí hay un poco de mentira y mala intención”, dijo Valderrama para presentar esta canción en la que a manera de historia dejan plasmado la fuerza y coraje de la mujer llanera.
Tradición es más que un disco de folclor llanero, es un álbum que va más allá de presentar una región, está en búsqueda de preservar un sonido y una idiosincrasia que con el pasar de los años se ha visto pisoteada por la “evolución” y el consumismo, un disco que busca cambiar perspectivas y brindar un mensaje de empoderamiento y amor por lo propio. ¿Qué mejor voz para hacerlo que la experimentada y campesina del Cholo Valderrama? Es una voz a la que le han pasado los años, pero no el sentimiento.
[Fuente]
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