La reducción de políticas inclusivas en el sector tecnológico plantea riesgos para la creatividad, la diversidad, el talento y el desarrollo de soluciones musicales. Esta tendencia creciente a reducir las políticas de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI) genera preocupación en empresas tecnológicas de alto perfil y en la industria musical apoyada en tecnología.
Lo que puede significar menos oportunidades para las mujeres, personas de géneros diversos y otros grupos minorizados, afectando según expertos, la innovación, la entrada de otros talentos y la capacidad del sector para crear soluciones musicales inclusivas y culturalmente relevantes.
La vocalista, compositora y artista Isobel Anderson afirma “Las industrias que carecen de diversidad e inclusión suelen tener salarios y oportunidades más bajos para casi todos, excepto para quienes ocupan altos cargos” “Es un error que las empresas eliminen el lenguaje de la DEI”. Durante años las iniciativas DEI han sido claves para abrir espacios a otras comunidades, por lo tanto, el retroceso de estás afectará notoriamente a la industria.
Aunque se esté presentando un cambio en muchos círculos corporativos, el apoyo público a la DEI contribuye a la definición de políticas públicas, que como resultado, está logrando que ciertas empresas opten por integrar la diversidad, la equidad y la inclusión en su cultura. El desafío ahora es abrir caminos hacia una industria que no solo suene bien, sino que también represente a todos.