Los faltantes y las curiosidades incómodas en la lista de nominados de este año.
s usual que cada vez que se conocen las nominaciones al Grammy, ya sea en su edición anglo o en su versión latina, haya críticas por la adición u omisión de algún artista. Sin embargo, tras la publicación de la lista de nominados a los Latin Grammy 2024 este martes, hay algo que se siente diferente, pero no en el buen sentido.
Mira la lista completa de nominados al Latin Grammy 2024 aquí.
Si tomamos como referencia a las categorías generales y a las principales de cada género en específico, encontramos artistas que, independientemente de los números, ofrecieron propuestas únicas dentro de sus campos de experiencia. Solamente por nombrar algunos tenemos a Mon Laferte con Autopoiética, a Residente con Las letras ya no importan, a Juliana con Mar adentro y a Rozalén con El abrazo. El problema comienza cuando notamos las grandes omisiones de esta edición, la presencia de títulos reencauchados para alargar rachas de éxito y la sensación de que pareciera que la popularidad estuviera por encima de la calidad artística.
Es entonces cuando surgen preguntas. ¿Hasta qué punto la popularidad tiene más peso que la creatividad? ¿Qué es lo que realmente hace que alguien sea merecedor de una nominación a los Latin Grammy? Si para 2023 la Academia Latina de la Grabación recibió alrededor de 18,000 propuestas, ¿cuántas recibió para 2024? Y, de todas estas, ¿las que más valen la pena son aquellas que provienen de artistas de renombre? Que un músico o intérprete sea bueno y goce de reconocimiento no significa que no pueda haber cabida para otros proyectos más pequeños que también lo sean, y justamente esta fue una de las principales críticas que recibieron los Grammy anglo por la constante presencia de Taylor Swift año tras año. Tampoco se trata de cuestionar el nivel artístico de X o Y figura, pero en una industria que se enriquece continuamente y donde mes a mes surgen discos increíbles, parece un poco injusto que reconocimientos de este calibre se otorguen a los mismos de siempre.
A continuación compartimos algunas observaciones y reflexiones que nos quedan tras conocer las nominaciones a los Latin Grammy 2024.
Grandes omisiones
-La mayor omisión en la lista de este año, prácticamente inaceptable, es que DATA, álbum debut de Tainy, que ocupa el #1 en nuestro listado de Álbumes que marcaron el 2023 y el #3 en el listado de grandes álbumes de 2023 de la edición estadounidense de Rolling Stone, no está nominado. En la 66ª edición de los Premios Grammy angloparlante el disco fue nominado en la categoría de Mejor álbum de música urbana, pero la Academia Latina le hizo caso omiso. A lo largo de su carrera, el productor ha sido la mente detrás de incontables éxitos de la música hispanohablante. Ahora es considerado el mayor pionero del género. Con su primer disco solista, Tainy enlistó a innumerables colaboradores estelares y creó un material que termina siendo —sin querer queriendo— una declaración de principios artísticos que redefine el éxito de los artistas latinos de la última década. ¿Su omisión es evidencia de que sin maquinaria no hay nominación?
–SAYONARA, de Álvaro Díaz, fue por mucho tiempo el álbum más esperado del género urbano y a su llegada no decepcionó, el disco se convirtió en un clásico instantáneo. Álvaro hizo uno de los álbumes urbanos más grandes de todos los tiempos. SAYONARA es un triunfo para la alternatividad y una guía para el futuro del género, que incluso ocupa el número 1 en nuestro listado de Los Mejores Álbumes de 2024, Hasta Ahora. Sin embargo, solo está nominado dos veces (Álbum de Música Urbana y Mejor Interpretación Reggaeton) y no aparece en ninguna de las categorías principales.
-La artista española Paula Cendejas no recibió ninguna nominación con su EP Tsunami, lanzado en mayo de este año. En el material, Cendejas reflexiona sobre momentos difíciles en su vida y lanza un material sumamente personal, empoderado, profundo, catártico y sónicamente variado. En él reflexiona sobre el aborto o la relación con sus padres. El sencillo principal, ‘PAENAMORAR’, ha recopilado más de 3 millones de reproducciones en Spotify.
-En a new star (1993), uno de los materiales más ambiciosos de su trayectoria, Rels B exploró su lado más ecléctico. Siempre vanguardista y con una maestría para entremezclar ritmos de hip hop, lo-fi, dancehall, reggae y más, el disco del mallorquín fue dejado de lado de las nominaciones, a pesar de haberse colocado entre los mejores debuts de un artista español en Spotify, reuniendo casi 15 millones de reproducciones.
-El homenaje al pop latino de Manuel Medrano, PERFECTO, no fue nominado. Estrenado en mayo, el retorno del cantautor colombiano crea un universo sonoro de pop que navega entre el folk, rock y jazz, demostrando una versatilidad innata y una evolución en sus capacidades de producción. Con letras que recuerdan al realismo mágico intrínseco a la cultura latina, PERFECTO creó nuevos clásicos dentro de la discografía de Medrano.
–Vida, la entrega discográfica más reciente de Ana Tijoux, es un trabajo de casi una década que fue pasado por alto por la Academia Latina de la Grabación. El canto a la vida de la cantante francochilena es una fusión de letras crudas acompañadas de hip hop, r&b, trap, afrobeat, dancehall y hasta disco. Aclamado por tocar temas como las desapariciones de la dictadura argentina en ‘Busco mi nombre’ y dedicar versos a su hermana fallecida en ‘Tania’, el material no debía haber sido ignorado.
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– ¿Dónde quedó España? La industria musical española ha tenido un crecimiento increíble en el último año y medio, y aunque esto se soporta con las cifras recientemente publicadas por Promusicae, solo basta con voltear a mirar al país ibérico para notar que los y las artistas de allí están desarrollando propuestas vanguardistas y emocionantes. Por eso que las menos de 20 nominaciones de músicos españoles en los Latin Grammy 2024 es decepcionante. Y es más desalentador aún si se toma en cuenta que solamente hay dos intérpretes españoles entre las cinco categorías principales: Íñigo Quintero en Mejor Artista Nuevo y Silvia Pérez Cruz en Canción del año, aunque esta última es una colaboración con Residente. Otros trabajos que destacaron en los últimos meses por su calidad musical como Figurantes de Vetusta Morla y Realismo Mágico de Carlos Sadness fueron relegados a una nominación en Mejor Diseño de Empaque. Y aunque se agradece la inclusión de Valeria Castro, Rozalén, David Bisbal y Niña Pastori, entre otros, es evidente que hace falta un mayor reconocimiento para España en términos musicales.
-A pesar de que en la categoría de Mejor Artista Nuevo aparecen buenas propuestas como Latin Mafia, otros artistas como Nsqk, RaiNao, Saiko, Judeline, Rusowsky, J Noa, Carmen María, y muchos más, eran igual de merecedores de la nominación.
Otros problemas
-El hecho de que actualmente la industria musical se encuentre absolutamente sometida ante las plataformas de streaming y funcione a base de sencillos, lleva a que algunos artistas muy consolidados estén siempre nominados en varios años consecutivos, cerrando la puerta a nuevas propuestas. Solo necesitan lanzar cualquier sencillo que cuente con la suficiente maquinaria de relaciones públicas para ganar nueva visibilidad en la próxima ceremonia. Una banda lanza su álbum y la Academia la nomina por un disco y una canción, para repetir la historia con otro sencillo en el año siguiente, de esa forma vemos a los mismos artistas nominados año tras año.
-En 2023 Shakira y Bizarrap ganaron el Grammy Latino por Canción del Año con ‘Shakira: Bzrp Music Sessions, Vol. 53’, y en 2024 el mismo tema aparece compitiendo en la categoría de Mejor Interpretación de Música Electrónica Latina por un remix que hizo Tiësto. Si en los próximos meses a alguien se le ocurre producir una versión diferente, ¿terminará nominada nuevamente en la próxima edición? Tenemos casi los mismos nombres de artistas año tras año, y ahora parece que también tendremos las mismas canciones con distintas mezclas.
-Las omisiones en el rap. Históricamente, el rap y la academia de grabación anglo no han tenido la mejor relación. A pesar de que la situación ha mejorado, el hecho de que no exista una categoría de Mejor Álbum de Rap dice mucho sobre las prioridades de la academia, mientras que la Categoría de Mejor Álbum de Música Urbana es muy amplia. Este año, en la categoría de Mejor Canción de Rap aparecen dos temas de Bad Bunny, alguien que, aunque hace rap en ocasiones, no se considera un rapero como tal.
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